sábado, 26 de abril de 2014

Blackstone y Jacob Rothschild, beneficiados con la desaparición del MH370

por Alfredo Jalife-Rahme

La búsqueda del vuelo MH 370 ha mostrado que Washington disponía de medios para seguir el desplazamiento del avión, que esos medios iban mucho más allá de lo que habían dicho las autoridades estadounidenses y que estas últimas demoraron además una semana en revelar lo que sabían sobre la desaparición del avión de la Malaysia Airlines. La búsqueda internacional del avión desaparecido también ha permitido saber que China no dispone de puertos de abastecimiento que le permitan desplegar su marina de guerra en una zona tan amplia. Pero, más allá de la desaparición del avión y de lo que esta ha permitido saber sobre las capacidades estratégicas de los participantes en la búsqueda, no podemos olvidar que este extraño incidente deja dos felices beneficiarios: Blackstone y Jacob Rothschild.

Jacob Rothschild, presidente de RIT Capital Partners plc y administrador de Blackstone. Es también presidente del Institute for Jewish Policy Research.




En la era tripolar geoestratégica del «mundo post Crimea» entre Estados Unidos, Rusia y China, es imperativo contrastar la avasallante desinformación de «Occidente» mediante la imprescindible consulta del portal multimediático ruso Russia Today (22/3/14).


Como suele suceder en los «accidentes» misteriosos, la insólita desaparición del vuelo MH 370 de la Malaysia Airlines –cuya explicación no satisface a nadie, y mucho menos a la mayoría de los afectados chinos– ha provocado infinidad de interpretaciones, algunas descabelladas y otras perturbadoras.

Mientras arreciaba la «guerra de sanciones» de Estados Unidos y la Unión Europea contra Vlady Putin, Russia Today publicaba en forma estrujante que «a los 4 días(¡supersic!) de que el vuelo MH 370 desapareciese, una patente de semiconductores fue aprobada por la oficina de patentes de Estados Unidos» [1]. ¿Se desató la «guerra de patentes»?




A juicio de Russia Today, el beneficiado con la patente de semiconductores de marras es Jacob Rothschild, de la polémica y cuan legendaria dinastía bancaria.

La patente estaba compartida entre 5 titulares con un 20% cada uno: la empresa Freescale Semiconductor, con sede en Austin (Texas), y otros 4 titulares, oriundos de la ciudad de Suzhou (China), empleados de la empresa texana, quienes se encontraban a bordo del avión extraviado.

El portal ruso señala que «si un titular de la patente muere, los demás titulares compartirán equitativamente(sic) los dividendos de la persona fallecida, siempre y cuando no se dispu­te en su testamento». «Desaparecidos" y/o "muertos» los 4 copropietarios chinos de la patente, «quien quede con vida consigue el 100% de la patente», como sucedió en este caso con la texana Freescale Semiconductor, que pertenece a la controvertida empresa invisible Blackstone, cuyo propietario es el banquero israelo-británico Jacob Rothschild [2].

Los «inventores» y «aplicantes» fueron los cuatro chinos «desaparecidos» y el «asignado» nada menos que Freescale Semiconductor. ¡Vaya suerte!

Destaca en forma inquietante la identidad invisible de Blackstone y su interconectividad con BlackRock y Evercore Partnership las que, coincidentemente, se encuentran detrás de la privatización de Pemex [3].


Resalta que Blackstone gestó a Black­Rock, dirigido por el israelí-estadounidense Larry Fink [4]. Más allá de la interconectividad cupular de Blackstone/BlackRock/Rothschild/GeorgeSoros/Scotia bank/Evercore Partnership/Protego con Kissinger Associates y la polémica aseguradora AIG que preside el israelo-estadounidense Maurice Hank Greenberg, vale la pena escudriñar la identidad empresarial de Freescale Semiconductor.




Resulta extraño que entre los 239 pasajeros, «20 pasajeros eran empleados del Pentágono» y además que «4 pasajeros tenían pasaportes falsos».

Por encima de las inevitables conjeturas, lo relevante radica en la profesión en electrónica de los 20 empleados del Pentágono muy versados en el arte de la «guerra electrónica» para evitar los sistemas de radares militares [5].

Curioso: de los 20 empleados «desaparecidos» de Freescale Semiconductor, 12 eran oriundos de Malasia y 8 de China.

Freescale Semiconductor se jacta de que sus productos tienen aplicaciones en comunicaciones en el campo de batalla; aviónica [6]; guía de misiles; guerra electrónica e identificación de amigo o enemigo.

La polémica empresa texana fue una de las primeras de semiconductores en el mundo y se creó como una división de Motorola, de la que luego se separó para ser adquirida en 2006 por Blackstone (perteneciente a los Rothschild), el omnipotente Grupo Carlyle y TPG Capital.

El Grupo Carlyle ostenta la titularidad del nepotismo dinástico de los Bush, de Frank Carlucci (ex consejero de Seguridad Nacional y ex jefe del Pentágono), del ex primer ministro británico John Major, y cuyo representante en México es el polémico Luis Téllez Kuenzler, hoy a cargo de la bolsa, donde han sucedido varias interrupciones extrañas de las cotizaciones [7].

TPG Capital es una poderosa firma de inversiones con sede en Fort Worth (Texas) que preside el israelo-estadounidense David Bonderman, quien se excede en extravagancias como haber pagado 7 millones de dólares a los Rolling Stones para celebrar su cumpleaños número 60, en 2002.

Freescale Semiconductor se especializa en la «guerra electrónica» y su «tecnología furtiva» (cloak technology) usa estrategias de «contramedidas electrónicas basadas en radares» (ECM): 1) interferencia del radar; 2) modificaciones de los objetivos y 3) el cambio eléctrico de las propiedades del aire.

Según The Daily Beast, un ataque israelí contra Irán iría más lejos que los conocidos bombardeos de aviones y probablemente desplegaría una «guerra electrónica» contra todo el sistema eléctrico del país persa, contra su Internet, su red de telefonía móvil o celular y las frecuencias de emergencia para bomberos y policías.

The Daily Beast asevera que «Israel ha desarrollado un arma capaz de imitar la señal de mantenimiento de los teléfonos celulares», que «detiene eficazmente las transmisiones» [8]. En la pasada década, «Israel ha acumulado un amplio espectro de armas de alta tecnología de un valor multimillonario que le permitiría atascar, cegar y ensordecer las defensas de Teherán en caso de un bombardeo aéreo preventivo».

Más aún: existe una «nueva tecnología furtiva» que «torna a los aviones invisibles a los radares y los oculta a los ojos humanos», mientras el «camuflaje de alta tecnología» puede crear campos electromagnéticos, según expone el sitio web military.com [9].

China acusa a Estados Unidos de una escalada de ataques informáticos [10], al unísono de que Pekín y Washington aceleran la carrera armamentista en materia de «tecnología de ocultamiento» de los aviones invisibles.



Lee Hamilton, presidente del Wilson Center. Este ex congresista demócrata salvó al presidente Ronald Reagan del desastre en el momento del escándalo Irán-Contras. En el 2000, participó en la elaboración del concepto de «responsabilidad para proteger». También copresidió la comisión presidencial de investigación sobre los hechos del 11 de septiembre de 2001 que desvió la atención hacia los atentados para ocultar el golpe de Estado que se produjo aquel día en Estados Unidos. Y en 2006, copresidió la Comisión Baker-Hamilton que decidió poner en pausa el descomunal despliegue militar estadounidense en el Medio Oriente.


La poderosa empresa bélica británica BAE Systems –vinculada a la NSA National Security Agency, a Seguridad del Hogar y al tristemente célebre Wilson Center, expuesta en el pestilente escándalo «Al-Yamama», posee el programa «adaptiv», que tiene como objetivo «ocultar los vehículos motorizados», extensivo a barcos y helicópteros.

¿No será que detrás de la «caja negra» del vuelo MH 370 se encuentra la dupla financiera y lúgubre de Blackstone/BlackRock, propiedad de los Rothschild?


[1] “United States Patent n°8671381 B1”, 11 de marzo de 2014.

[2] «Rothschild hereda una patente de semiconductores al desaparecer el MH370», Russia Today, 22 marzo de 2014.

[3] «[BlackRock: el mayor inversionista del mundo detrás de la privatización de [la empresa petrolera mexicana] Pemex->http://www.jornada.unam.mx/2013/12/...]», de Alfredo Jalife-Rahme, La Jornada, 11 de diciembre de 2013.

[4] “Lessons From Blackstone for BlackRock”, de Jeffrey Goldfarb,The New York Times, 23 de enero de 2014.

[5] “Malaysia jet hidden by Electronic Weaponry? 20 EW defense-linked passengers”, de Deborah Dupre, Examiner, 9 de marzo de 2014.

[6] El término «aviónica» es una contracción de los términos «aviación» y «electrónica» que se utiliza para designar la aplicación de la electrónica en la aviación. Nota de Red Voltaire.

[7] «Carlyle Group».

[8] “Israel’s Secret Iran Attack Plan: Electronic Warfare” de Elie Lake,The Daily Beast, 16 de noviembre de 2011.

[9] “Invisible Planes: China, US Race for Cloaking Tech”, de Gene J. Koprowski, Fox News, 17 de diciembre de 2013.

[10] “China points finger at US as hacking attacks soar”, Shanghai Daily, 29 de marzo de 2014.

sábado, 19 de abril de 2014

La mala fama de la prensa al descubierto

Existen ejemplos muy recientes de periodistas que han sido despedidos o "dimitidos".
En ABC, Esther Palomera.
En El Mundo, nada más y nada menos que Pedro J. Ramirez.
Este par de ejemplos recientes y calientes simplemente demuestra lo que ya se sabía desde hace mucho tiempo, y se sabe aún, pero nadie osa admitir:
El poder es el que controla la prensa. La figura del poder puede ser la que cualquiera entienda o quiera.
Los intereses políticos, financieros, etc. En definitiva los que manejan primero el dinero y con él manejan el poder.

Hace dos siglos (1880), los colegas al que llamaron decano de la profesión, John swinton, se expresaba de esta manera ante la petición de una palabras en un brindis en el club de prensa de Nueva York:

"There is no such thing, at this date of the world's history, in America, as an independent press. You know it and I know it. There is not one of you who dares to write your honest opinions, and if you did, you know beforehand that it would never appear in print. I am paid weekly for keeping my honest opinion out of the paper I am connected with. Others of you are paid similar weekly salaries for similar things, and any of you who would be so foolish as to write honest opinions would be out on the streets looking for another job. If I allowed my honest opinions to appear in one issue of my paper, before twenty-four hours my occupation would be gone. The business of the journalists is to destroy the truth; to lie outright; to pervert; to vilify; to fawn at the feet of mammon, and to sell his country and his race for his daily bread. You know it and I know it, and what folly is this toasting an independent press? We are the tools and vassals of rich men behind the scenes. We are the jumping jacks, they pull the strings and we dance. Our talents, our possibilities, and our lives are all the property of other men. We are intellectual prostitutes."

Si ya en esa época, al que consideraban decano del periodismo, y era querido por su compañeros a la vez que admirado, comentaba lo anterior, cómo no habrá cambiado y evolucionado la película.

En los años setenta, el premio pulitzer, Carl Bernstein, escribía largo y tendido ya no sólo sobre la corrupción de la prensa, sino sus íntimas relaciones con la CIA.
Periodista del Washington Post, quiso dejar clara la relación íntima entre la prensa y los servicios secretos y cómo el poder manejaba, controlaba, y manipulaba a su antojo periodistas, editorialistas, directores y toda la jerarquía que puede haber en un medio. Aquí y en inglés.

Sólo por centrar el tiro en la prensa española ( y obviando televisiones privadas, públicas y autonómicas), sirvan ciertas reflexiones para ver qué está pasando.

El bipartidismo político estadounidense exportado a bombazos a medio mundo y en concreto a España con su ya famosa transición y democracia, dibuja esa misma estela en el periodismo actual, mal comprendido como prensa libre o veraz.

La evolución de ciertos periódicos y periodistas, incluso su mutación no son hechos aleatorios.

Cuando se funden los intereses económicos y políticos en una misma caja llena de dinero que son los bancos, el accionariado al fin y al cabo es el que manda en todos esos consejos de administración. Ya sea de un periódico, de un banco o de un gobierno privatizado mediante esa figura que son los partidos políticos que chupan de la misma teta. Y sino, de la otra.
Misma leche para alimentar al mismo lactante.

La extensión epidémica de la corrupción en España sobre todo en las altas capas de la pirámide de poder ya no indigna a nadie: se da por sentado que es así y que es irreversible. Entre el PPSOE se han merendado todo.
Los sindicatos están incluidos, la patronal, la iglesia, el ejército, el poder judicial, y cómo no el cuarto poder: la prensa.

El que quiera noticias, verdad, hechos reales, sin manipulación, debería buscarse la vida, o por lo menos no alimentar a Marhuendas, Pedro Jotas, o Cebrianes.
Ya pagamos demasiados impuestos para que esas dos tetas amamanten a muchos monstruos, como para que encima tengamos que pagarles esa mierda que cagan.




jueves, 17 de abril de 2014

Vuelo MH370: caso abierto

La teoría de la desaparición del vuelo de las aerolíneas malayas MH370 y de que se haya hundido en el mar, cada vez carece de menos sentido.
En una zona tan vigilada por los satélites, por los drones, y con un tránsito incesante de naves y aeronaves, resulta difícil de creer que un gran avión como un boeing 777 pueda desaparecer del mapa sin dejar rastro si suponemos que se ha estrellado en el mar.
Un avión no desaparece así por así sin dejar rastro, salvo que seas un mago estilo Copperfield.
Pero no es el caso, y aquí no hay magia.

Existen varios problemas para que la realidad salga a la luz, entre ellos uno fundamental, y es la tecnología de vigilancia que se está usando en la zona, así como el rango de los radares aéreos.
Nadie va a desvelar qué ni cómo lo ha visto.
Y es muy posible que muchos estados ahora sepan dónde está el avión si no se ha estrellado.

El caso que entre llamadas a móviles que daban tono, llamadas perdidas del copiloto que ha registrado alguna antena de telefonía móvil, la falta de rastros del avión, y menos de sus cajas negras, una foto geolocalizada enviada por un experto en seguridad (vamos que es un espía americano encubierto bajo la marca IBM), la situación se complica para los ejecutores y genera muchas dudas en la gente.

La foto geolocalizada del pasajero espía americano le sitúa en la base militar de Diego García, al sur de la india, cerca de las islas maldivas. Sí, un paraíso, pero no para los pasajeros de ese velo.

No se sabe si es casualidad que en ese avión viajaran tantos técnicos relacionados con la firma Freescale.
Entre ellos Philipp Wood, adscrito a IBM, pero de facto trabajando o supervisando trabajos en Freescale.
Pero qué es Freescale?
Pues una empresa que se dedica a la microelectrónica, con bastante éxito por dos razones:
No es americana ni radicada allí, por lo tanto, no está per se controlada por la CIA ni el resto de amigotes.
Es de bajo coste comparado con otras. Diseño malayo ( con apoyos foráneos) y produce en China.
Algo bueno y barato.

Diseñan microcontroladores buenos muy diminutos y baratos.

Esto podría sonar a guerra comercial entre empresas. Vamos una película de Hollywood.
Podría ser.
Pero otros dicen que si lo puedes comprar mejor lo robas.
Ya sabemos que las teorías sobre conspiraciones las hay para todos los gustos. Sabemos que los medios manipulan a su antojo. Y sabemos que la verdad nunca llega de primeras, pero cuando hay dudas y últimamente las hay en todos los acontecimientos, por lo menos hay que pensar mal que igual acertamos.





sábado, 5 de abril de 2014

Captagón: alimento extremista




Mientras la prensa de Occidente y de las monarquías del Golfo sugieren que los yihadistas se inspiran fundamentalmente en la lectura del Corán, en Siria los hechos están demostrando que se drogan con Captagón.

En 2 días, el Ejército Árabe Sirio ha interceptado un auto repleto de pastillas de Captagón y un camión cisterna que transportaba una tonelada de tabletas de esa droga.

El Captagón (fenetilina) es una anfetamina que provoca un estado de euforia e insensibilidad al dolor. Mezclado con otras drogas, como el hachís, el Captagón forma parte de la ración alimenticia básica de los yihadistas, quienesse vuelven así insensibles a su propio sufrimiento y al que causan a los demás. Su uso los vuelve capaces de enfrentar las peores privaciones y de cometer las peores atrocidades.

Contrariamente a una idea muy extendida, la motivación fundamental de los yihadistas no es de índole religiosa sino la búsqueda de placeres inmediatos. Las principales fuentes de reclutamiento son la delincuencia de poca monta y las cárceles.

Fabricado en 2011 por la OTAN en un laboratorio situado en Bulgaria, el Captagón se produce actualmente en todo el Medio Oriente, incluso en territorio sirio.

martes, 1 de abril de 2014

El principio de la Historia


por JUAN MANUEL DE PRADA



Para echarme unas risas, he estado releyendo estos días El fin de la historia y el último hombre, el bodriete de Fukuyama que, hace veinte años, fue entronizado como una suerte de biblia (para dummies) por cierta derecha proamericana. Se publicaba aquel libro en los años en que se producía el colapso de la Unión Soviética; y en los que el «liberalismo democrático» y el «libre mercado» aspiraban –al modo de una Parusía laica– a instaurar un reinado de progreso indefinido y delicias universales. Y, en efecto, durante algunos años así pareció que fuese a ocurrir: el comunismo había sido derrotado, o recluido en las mazmorras del atlas; y en el seno del «mundo libre» ya ni siquiera la Iglesia se atrevía a discutir la ideología hegemónica (y, en caso de que se atreviera, se le sacaban los colores con la pederastia y santas pascuas). Por supuesto, en este reinado soñado por Fukuyama, se permitía ser liberal de izquierdas o de derechas, incluso liberal ultraizquierdista o ultraderechista, porque la ideología hegemónica necesitaba que sus adeptos estuviesen siempre a la greña, engolosinados con la quimera del individualismo. No en vano Karl Popper había señalado que toda forma de filosofía política que propusiese a la sociedad humana una meta común debía ser erradicada.
Pero una sociedad desvinculada en la que las metas son individuales es una sociedad condenada a la destrucción; pues la libertad negativa (ser «libres de», no «libres para») acaba generando, infaliblemente, apetito de caos y nihilismo. Así, el paraíso soñado por Fukuyama se llenó de demonios endógenos y exógenos (los segundos convocados por los primeros) que fueron minando sus pilares: la rapacidad financiera, el pansexualismo, las migraciones masivas, la apostasía, el descrédito de las instituciones fueron elementos en apariencia dispares, pero secretamente convergentes, que aceleraron el proceso de necrosis del «mundo libre». Y, puesto que en la «sociedad abierta» no existen metas comunes que construyan, hay que buscar enemigos externos presentados como encarnaciones del mal ante sus adeptos, que de este modo se unen (aunque sea en una unidad de hormiguero, un remedo de unidad sin virtud y sin corazón) contra ellos. Este papel lo representó en un principio el «terrorismo islamista», con los resultados catastróficos de todos conocidos: primaveras árabes, etcétera.
Entonces el «mundo libre» volvió la mirada, nostálgico, al antiguo solar del comunismo y se encontró… ¿Con qué se encontró? Con una Rusia que pugnaba por ser otra vez grande, una Rusia que no se conformaba con el papel ancilar de vomitorio del «mundo libre» que se le había asignado, una Rusia que pugnaba por recuperar e insuflar vida a sus tradiciones (su Tradición), una Rusia que se alzaba frente a la peste bubónica y nihilista de la «sociedad abierta» y empezaba a mostrarse capaz de acaudillar una rebelión frente a ella, como hace dos siglos hizo el zar Alejandro I. Había que convertir esa Rusia cada vez más pujante –en contraste con una Europa terminal, ahogada en su propio vómito inane– en el enemigo común. Para convencer a la gente impresionable chapada a la antigua, se dijo que Putin era un exagente del KGB; y para convencer a la gente chapada a la moderna, se dijo que a Putin no le iban las mariconadas. Y, para consumo de unos y otros, no fue difícil recuperar esa imagen de Rusia como sinónimo del despotismo que, desde el siglo XIX, ha hecho fortuna en la cofradía liberal. Los déspotas siempre llaman déspotas a quienes vienen a destronarlos.
Con la resurrección de Rusia acaba el fin de la historia, según aquel sueño memo de Fukuyama. Porque Rusia puede devolver la historia a su principio.