sábado, 24 de septiembre de 2011

De este blog, de las guerras ilegales, y de la ilegalidad en general

Comienzo este blog años después de haber comenzado otro blog por culpa de otra guerra que ocurrió en 2006 cuyas similitudes me siguen abrumando y afectando.

Llevo ya meses siguiendo la guerra que está teniendo lugar en Libia, una guerra ilegal.
Y, a medida que indago, como he indagado en otras guerras, siempre acabo con un cabreo monumental.
Indagar es mi defecto como ciudadano: no debería.
Pero como persona libre e independiente necesito saber y conocer la realidad por mí mismo, no por lo que me venden o intentan convencer los medios.
Criticar abiertamente y tener voz para decirlo es lo que quiero. Se ven y leen informaciones absolutamente sesgadas, insensatas, y faltas del mínimo rigor informativo que resulta repulsivo.

Descartes sigue vigente, o por lo menos debería.
No pido nada, ni prometo nada.
El que quiera que lea, el que no quiera, que no lo haga.
Este es un momento crucial donde sólo  queda la libertad que ofrece internet para contrarrestar la prensa "mayorista". En un mundo que llaman tan globalizado, lo que menos globalizado está, es la información, y sobre todo la información veraz.